La principal premisa de diseño saludable ha sido la iluminación natural de todos los espacios de trabajo. Partiendo de una oficina muy subdivida y oscura, se han eliminado todas las particiones y tabiques, definiendo nuevas divisiones transparentes que conectan visual y lumínicamente toda la oficina. De la misma manera, se han elegido colores claros para una mayor reflexión de la luz.

Esta conexión entre espacios también ha permitido una mejor ventilación natural de todos los espacios, al disponer de dos orientaciones cruzadas.

La elección de los materiales y acabados libres de tóxicos y la incorporación de vegetación también han sido importantes en todo el proceso de diseño.

La oficina ha sido dotada con un aseo accesible. Se han eliminado estrechos pasillos innecesarios, priorizando amplios espacios de distribución, de estar y de trabajo.